Las consecuencias del cambio climático en Chile suman y siguen. En febrero pasado, las precipitaciones producto del invierno altiplánico provocaron desbordes de ríos e inundaciones en las provincias del Loa y Antofagasta. Los inviernos en la zona central, en tanto, han dejado de ser lluviosos para concentrar sus precipitaciones en pocas horas donde la caída de agua es muy intensa.
Para evitar desastres naturales de este tipo, el ministerio de Bienes Nacionales ha estado trabajando en el desarrollo de modelos predictivos del comportamiento de las aguas en las quebradas. A través de la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Información Territorial (SNIT), la cartera ha desarrollado un software libre llamado Geonodo, cuyo objetivo es recolectar y procesar datos del territorio nacional.
El desarrollo y crecimiento de este programa depende factores como el espacio físico, gente con la capacidad para desarrollar algoritmos para la solución de problemas y un computador capaz de procesar gran cantidad de información. Para lograrlo, la Universidad de Chile y el ministerio firmaron un acuerdo de colaboración que permitirá procesar el gran volumen de datos recolectado por SNIT, aprovechando el conocimiento generado por los investigadores del Centro de Modelamiento Matemático de la Universidad de Chile.
El convenio también permitirá utilizar el supercomputador más poderoso de nuestro país, administrado por el Laboratorio Nacional de Computación de Alto Rendimiento (NLHPC, por su sigla en inglés), para analizar esta información y dar respuesta ante este tipo de situaciones de la mano de la construcción de modelos predictivos.
Actualmente, ya hay imágenes almacenadas y procesadas en el supercomputador que fueron recolectadas por SNIT a través de drones y satélites. Estas fotografías están a disposición de todas las instituciones estatales para la correcta toma de decisiones en casos de emergencia, considerando las dificultades y obstáculos presentes en la diversidad del territorio nacional.