Fuerza Aérea de los EE.UU. busca apoyo del MIT en materia de Inteligencia Artificial

Recientemente se anunció una colaboración entre el Massachusetts Institute of Technology (MIT) y la Fuerza Aérea de los EE.UU. que se centrará en el desarrollo y aprovechamiento de la Inteligencia Artificial (IA). El objetivo es crear aplicaciones relevantes para el trabajo humanitario realizado por la Fuerza Aérea, y no directamente relacionadas con el desarrollo de armas.

En una entrevista con MIT Technology Review, la secretaria de la Fuerza Aérea de los EE.UU., Heather Wilson, dijo que la IA es un componente clave de la Estrategia de Ciencia y Tecnología de la Fuerza Aérea. Su plan estratégico, publicado en abril, menciona la necesidad de aprovechar las tecnologías emergentes de manera más rápida y eficaz.

Inversión en I+D

La Fuerza Aérea de los EE.UU. ya financia una gran cantidad de investigación y desarrollo: tiene contratos y/o convenios con más de 10.000 entidades diferentes, gasta US$ 2.500 millones al año en investigación básica y en etapa inicial, y US$ 25.000 millones en investigación y desarrollo de tecnologías aplicadas. La nueva relación con el MIT hará que contribuya además con US$ 15 millones al año para hacer investigación cooperativa.

Once miembros de la Fuerza Aérea trabajarán junto a los profesores y estudiantes del MIT en una variedad de proyectos. El Departamento de Defensa de los Estados Unidos ya tiene un centro de investigación MIT (el Laboratorio Lincoln).

Daniela Rus, directora del Laboratorio de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial (CSAIL) del MIT, donde se integrará la incubadora, argumenta que los tipos de problemas que se abordarán son de gran interés para los investigadores académicos.

“Estos son problemas importantes para el alivio de desastres, como estar en un entorno donde no puedes anticipar que los mapas funcionen, que las cosas estén donde se supone que deben estar. Todas estas aplicaciones tienen una gran incertidumbre y complejidad”, apunta.

Por su parte, Maria Zuber, vicepresidenta de investigación del MIT, dice que la colaboración solo involucra ayudar a la Fuerza Aérea con sus objetivos.

“MIT no hace investigación de armas”, asegura.

Otras ventajas

Para nadie es invisible el potencial de los tipos de algoritmos y técnicas en los laboratorios de investigación académica e industrial para revolucionar el ejército. El aprendizaje automático podría optimizar muchos procesos, desde la nómina hasta la logística. También sería vital para un aspecto crítico de las misiones: recopilar información y extraer información útil.

Según los expertos, el trabajo va mucho más allá del uso en los sistemas de armas, un tema que, a menudo, surge cuando las personas piensan acerca de las aplicaciones militares de la IA.

Mejoras

El movimiento es parte de un esfuerzo por mejorar las capacidades de inteligencia artificial de la Fuerza Aérea. En febrero, el Pentágono publicó un documento no clasificado que describe su plan para abarcar la IA. El texto dejó en claro que la tecnología es crucial para la preeminencia de los militares. La adopción militar de la IA en otros países, especialmente Rusia y China, también es un factor clave.