Este telescopio espacial ayudará a identificar si exoplanetas distantes podrían ser habitables

La Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en ingles) lanzó una misión para estudiar exoplanetas conocidos con mayor detalle, dándonos una mejor idea del potencial de los mundos extraterrestres para albergar vida.

Se trata de CHEOPS, un pequeño telescopio espacial diseñado para investigar exoplanetas que son más grandes que la Tierra y más pequeños que Neptuno, el cual tendrá la tarea de medir los tamaños de exoplanetas conocidos, cuyas estimaciones de masa ya se han determinado con instrumentos terrestres. Armados con los números de masa y tamaño, los científicos deberían poder determinar las densidades de estos planetas.

¿Cómo funciona? CHEOPS funciona de manera muy similar a otras misiones de estudio de exoplanetas. Estudiará objetivos a medida que transiten frente a sus estrellas anfitrionas, monitoreando la atenuación y el brillo de la luz de las estrellas para determinar el tamaño del planeta. El plan es realizar múltiples observaciones en planetas objetivo seleccionados, especialmente aquellos que se cree que son potencialmente habitables.

Relevante

Conocer la densidad de un planeta puede ayudar a revelar algunas cosas clave sobre si podría ser habitable. Primero, nos permite saber si es un planeta rocoso o gaseoso; la noticia es obviamente mejor cuando apunta a una superficie sólida. En segundo lugar, si hay una atmósfera en ese planeta, la densidad se puede usar para decirnos qué tipo de atmósfera es y qué espesor tiene (es decir, si tiene el tipo de capa protectora necesaria para mantener la superficie cálida y acogedora para la vida). Ahora bien, nada de esto garantiza que la vida pueda sobrevivir en la superficie, ciertamente aumenta las probabilidades.